Hablar del románico de nuestra provincia, no es hablar solo de uno de los románicos más destacados de la Península Ibérica, también supone hablar de cultura, de tradición, de costumbres, y de un modo de vida único, que se extiende y deja huella en el paisaje a lo largo de los siglos.

La provincia de Segovia cuenta con un total de 300 edificios o restos románicos de entidad a lo largo y ancho de su territorio, lo que supone una de las mayores concentraciones de restos románicos de toda España.

La capital cuenta con más de una veintena de iglesias románicas de los siglos XII y XIII, lo que supone, tras Zamora, la mayor cantidad de edificios de este estilo en cualquier ciudad española, por otra parte la provincia es de una riqueza románica asombrosa, que cuenta con gran cantidad de ermitas, iglesias que impresionaran a  cualquier viajero que se aleje de las principales rutas y se adentre en el ámbito rural segoviano.

En Segovia el viajero, podrá  deleitarse y descubrir, la mayor colección de galerías porticadas de toda Europa. Estas galerías son pequeños espacios semicerrados por arquerías que apoyan sobre columnas con capiteles tallados con los más diversos motivos: escenas bíblicas (especialmente del Nuevo testamento y en concreto del Ciclo de la Navidad), monstruos fabulosos, escenas costumbristas, etc. fruto de la apasionante mentalidad medieval.

Estas galerías o pórticos fueron construidos generalizadamente en la mayoría de las iglesias románicas de Segovia y amplias comarcas de Soria, Burgos, Ávila y Guadalajara para albergar reuniones concejiles pseudodemocráticas, donde se discutían los asuntos concernientes a la vida de la población. Este hecho le confiere un privilegiado valor histórico independientemente del artístico.

Además, no podemos olvidar las elegantes torres segovianas decoradas con varios pisos de arcos que se alzan orgullosas en cualquier iglesia rural. De nuevo Segovia destaca en este apartado y podemos afirmar que es la provincia que más campanarios románicos conserva junto a la provincia de Burgos.

Los apasionados de la historia y de la arquitectura de siglos atrás vivirán a través del  recorrido del románico segoviano, un viaje por los mejores ejemplos del románico, templos y edificios construidos en piedra y ladrillo que muestran un estilo predominante en la provincia, y  caracterizados además por un pórtico o un atrio adosado a los muros de los templos, del que ya hemos hablado con anterioridad.

Como hemos dicho al inicio de nuestro texto la Ruta del románico de Segovia, tiene una extensa representación, que recorre toda la provincia, de norte a sur de este a oeste, desde Fuentidueña, a Grado del Pico, Coca, Tenzuela y los pueblos serranos a los pies de la Sierra de Guadarrama.

 Debido a su proximidad, desde nuestros alojamientos rurales, podremos disfrutar, de la gran belleza  del románico,  de los pueblos serranos del piedemonte de la sierra de Guadarrama.

 Dichos pueblos próximos a nuestras casas rurales son por ejemplo; Torrecaballeros, Sotosalbos y las dos atractivas iglesias de Pelayos del Arroyo y de La Cuesta, ubicado en lo alto de una colina, son paradas obligatorias para el viajero, que descubrirá construcciones sorprendentes y también objetos de estilo románico como portadas, frescos o pilas bautismales.

Además, en esta ruta se pueden visitar: Las iglesias de Caballar, El Cubillo, El Guijar de Valdevacas, la Iglesia de San Lorenzo en Navafría. Y por supuesto sin olvidar el Románico del Valle del Pirón y Turégano.

No muy lejos de nuestros alojamientos también podremos disfrutar del románico de:

Pedraza de la Sierra conserva su aire medieval, destacando su plaza Mayor sólidos edificios como el Palacio de la Inquisición el Castillo de los Velasco (1516) y numerosas casas blasonadas. Sepúlveda (principal foco del románico segoviano).  De interés la Plaza Mayor, el conjunto arquitectónico popular y iglesias románicas, El Salvador, la Virgen de la Peña, con un poco frecuente tímpano decorado, San Bartolomé, San Justo y Santiago. En las Hoces del Río Duratón se encuentra el Priorato  de San Frutos del siglo XI, a 11 km de Sepúlveda. Y el pueblo de Duratón, situado a 7 km de Sepúlveda a orillas del río que lleva el mismo nombre conserva una iglesia románica.
Fuentes:arteguias.comSegoviaunbuenplan.com,

turismocastillayleon.com.